En este momento de crisis económica es fácil que caigan en el olvido las Polítiticas de conciliación de la vida familiar, tal y como describe Vicente Baos en su excelente artículo. Sin embargo, siendo hoy el Día Internacional de la Mujer, debemos hacer un esfuerzo aún mayor de todos para recordarlas, por todas las mujeres que luchan por sus puestos de trabajo y su realización profesional, tanto como por mantener su casas y sus familias, como nos relata Amalia Arce en el Diario de una mamá pediatra, así como por todas esas mujeres que directamente no se les da la oportunidad de trabajar debido precisamente a las cargas familiares.
¿ Qué es la Conciliación de la vida profesional?. Hace ya dos años que se publicó la “Guía de buenas prácticas para promover la conciliación de lavida personal, familiar y profesional desde Entidades Locales de España y Noruega», promovida por el Instituto de la Mujer. En ella se define la conciliación laboral como un objetivo de la Política del Bienestar en el que todas las personas disfrutan de la libre disposición de su tiempo, sin incurrir en la desatención de ninguna de sus necesidades, tanto de ocio como de cuidados
personales y/o familiares, y sin interferir en sus obligaciones profesionales, y apela a la corresponsabilidad: individual, entre mujeres y hombres, para romper los roles de género tradicionales y la estructura sexual de los usos del tiempo. Corresponsabilidad social, entre los distintos agentes sociales e institucionales,es decir, Estado, instituciones, empresas, sindicatos, organizaciones no gubernamentales, etc., al objeto de ampliar los grados de libertad, para que hombres y mujeres puedan elegir distintas formas de combinación entre vida personal, familiar y profesional y lograr el equilibrio. Y corresponsabilidad familiar, entre los distintos miembros de la familia, a través de un pacto intergeneracional que respalde el sostenimiento económico y afectivo del hogar.
Esta corresponsabilidad lleva al equilibrio entre la vida personal, familiar profesional con los siguiente beneficios:
-mejora la calidad de vida y el bienestar de las personas: ya que el trabajo deja de ser el eje central respecto al resto de esferas vitales. Al mejorar la calidad de vida, disminuye enfermedades laborales y el estress y favorece la promoción en esa empresa.
-además: potencia la consecución de la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, fomenta la participación de mujeres y hombres en la sociedad actual: la conciliación de la vida laboral y doméstica implica al hombre y a la mujer, mejora el sistema productivo, porque se aprovechan todos los talentos de hombres y mujeres, que de no ser así se perderían, incrementa la eficiencia y productividad de las empresas, mejora el mantenimiento del sistema social de bienestar.
¿y qué medidas son las que se han de llevar a cabo?. El enfoque es multidisciplinar, desde los poderes públicos, instituciones, empresas, concienciación de la ciudadanía. Entre otras medidas se recomienda la flexibilidad de los turnos horarios para distribuir los tiempos de ocio y familiar lo más eficientemente posible, premiando a las empresas que favorecen la conciliación, concienciar de la necesidad de igualdad de condiciones en el empleo, de la corresponsabilidad en el ámbito del hogar…
Entre las conclusiones del IV Congreso Nacional de la Comisión Nacional para la racionalización de los horarios españoles, celebrado en Noviembre del 2011 están: el tiempo es un recurso perecedero que no se recupera, mejorar los horarios funciona: es bueno para la empresa y bueno para las personas, hay una realidad que es la diversidad de personas que componen las empresas y la internalización de las mismas, por lo que la diversidad horaria es una realidad, el tiempo educativo es clave para el desarrollo de la persona, conciliar es convivir, el tiempo de trabajo está limitado por la salud laboral, el primer motivo de accidente de trabajo y enfermedad profesional es la organización del trabajo, los trabajadores de jornada partida manifiestan no diferenciar y se llevan trabajo a casa, doble presencia de la mujer como factor de riesgo.
El esfuerzo para no desandar y seguir caminando hacia la no precariedad laboral femenina es de TODOS.